martes, 8 de enero de 2008

Cómo saber si un hijo toma drogas

El acceso a sustancias psicoactivas en la sociedad de hoy es mucho más fácil de lo que nos imaginamos. Por esta razón, los padres deben estar permanentemente atentos a los cambios negativos en el comportamiento de sus hijos adolescentes pues ello puede ser indicio de que consumen droga.
El abuso de estas sustancias puede generar comportamientos que alteran la estabilidad, el desempeño en el estudio, la concentración, los movimientos, la agresividad, los pensamientos, los estados de ánimo, la ansiedad, el raciocinio, la conciencia, la voluntad, la estabilidad, y en general otros aspectos que se desarrollan según el ambiente y el estado actual de la persona.
Estos son algunos casos concretos que nos ayudarán como padres a evaluar una situación de riesgo en nuestros hijos:

El desempeño escolar: faltando a clases, o desarrollando mal comportamiento.
El interés en actividades: perdiendo interés en sus pasatiempos habituales, deportes o actividades favoritas.
Las rutinas cotidianas: comiendo en exceso o dejando de comer; durmiendo en exceso o dejando de dormir.
La selección de amigos: cambiando de amigos, o juntándose con gente que se sabe que utilizan drogas.
Alteración de su personalidad: mal humor, nerviosismo, agresividad o una rebeldía persistente.
Hermetismo en sus cosas: cerrando con llave sus cuartos, gavetas o cajas.
Objetos que delatan

Además existen ciertos objetos que usted puede encontrar en su casa, o en posesión de sus hijos que pueden indicar que están usando drogas.

Por ejemplo:

Papeles para enrollar cigarrillos, pipas y pinzas que se usan para consumir marihuana.
Frascos pequeños de medicinas, espejos, o cuadritos de vidrio que se usan para consumir cocaína.
Latas o recipientes vacíos de pegamento, o latas vacías de spray para el pelo, que pueden ser restos del consumo de inhalantes.
Vale resaltar que no sólo las drogas ilícitas son psicoactivas, también lo son el consumo inadecuado medicamentos legales como analgésicos y tranquilizantes.

Es importante incluir dentro de las conversaciones con los hijos estos temas, explicándoles las consecuencias del uso de drogas y de lo que pueden encontrarse fuera de casa. Hable de temas de interés para ellos, infórmese y hágale saber sobre las sustancias que pueden ser adictivas. Invítelos a realizar actividades como el deporte, el arte, la música, etc. Recuerde también reforzarles su autoestima, valore sus capacidades y corríjales cuando sea necesario.


Conviene tener en cuenta que…

La edad cronológica de la adolescencia puede variar. Hablamos de 12 años en adelante, pero puede ser distinto para cada persona.

No hay adolescencia, sino adolescentes. Existen personas concretas de carne y hueso, con peculiaridades y circunstancias de todo tipo.

No existen dos adolescentes iguales. Cada persona vive la adolescencia de una manera peculiar, por tanto los problemas y las soluciones son distintas en cada caso.

No hay recetas. Cualquier cosa que se afirme tiene mucho de ensayo, validada por la experiencia de muchas personas, pero sin pretensiones de exactitud matemática.

La adolescencia no es una enfermedad. Es una etapa necesaria para madurar, para adentrarse en el mundo, para desarrollar la personalidad.

El adolescente sufre y hace sufrir. Acepte ese hecho, que será la mejor preparación para sobrevivir y poder ayudar.

Distinguir mis problemas de sus problemas. En todo momento debe saber diferenciar los diversos problemas que se presentan. La mayoría son del adolescente. Sólo serán suyos si los acoge como tal. No se lo aconsejamos.

0 comentarios:

Design konnio.com

eXTReMe Tracker